lunes, 26 de enero de 2015

EN TIERRA DE ACANTOS






El diapasón latía acompasado
al candor de la pureza,
una cadencia limpia interpretada
con el roce de nuestra piel,
paseando por el filo de la luna,
arrullando el perfil en un solo contraluz.
Cerrar mis ojos y siempre ahí,
sosteniendo las facciones sonrientes de mi rostro.
Y un arpegio disonante,
profanó el hálito níveo
que envolvía nuestra atmósfera,
desterrándonos de la luna.
Ahora somos selenitas en tierra extraña,
y el Acanto yergue su flor,
entre dudas y recelos,
sin más calor que aquel reflejo
que nunca llega a esta orilla.
Mientras tanto,
coloreamos una sombra que está crecida,
esperamos una paz que se perdió,
un rescoldo entre el hielo,
una ruta que nos guíe
hacia un nuevo caminar.

miércoles, 7 de enero de 2015

AXIOMAS HERIDOS



El relente manosea los axiomas
que han quedado obsesivos,
y la escarcha aferrándose a tú dolo
que ha ensuciado la inocencia,
compañera de lo nuestro.
Es la duda dictadora de mi mente,
la tirana que aprisiona al mimoso.
Es tu soplo irreflexivo
un tsunami provocado,
que arrasó todo mundo conocido.
Es tu miedo heredado
el que anda respetando al encontrado,
y olvidando al que anida junto a ti.
Ya no hay orden,
y el concierto suena solo, sin maestro,
sin abrigo, en enero,
con la helada sobre el verde
en un pardo desasosiego,
profanando lo que antes era nítido.