martes, 7 de octubre de 2014

OÍDOS SORDOS

Que nadie te diga, niña,
a quién debes amar,
ni el matiz con que dorar
la alcoba de tu deseo,
o el aroma que eriza tu sexo.
Que nunca debas ocultar
la mano que os une, vagando
por ciudades de ojos anónimos.
Que nadie te diga
que los sueños, sueños son,
o que los pájaros que te rondan
anidaron en tú azotea.
Amordaza al eco obstinado
que eterniza el azogue
concebido desde atrás.
Confina la aflicción
de las ramas de tu árbol,
afianzando tu conciencia,
sabiendo que fuera de la jaula
amar no es enfermedad,
sentir desde el corazón
anula a la memoria,
olvidar es la tarea
más usual cada día.
sé tú misma y partirás
donde no existe tiempo, ni moda,
donde sólo hay amor.
Que nadie te diga, niña….



No hay comentarios:

Publicar un comentario